domingo, 26 de diciembre de 2010

Réquiem Capitulo 5


Capitulo 5
Aun no asimilo la situación ¿cómo es que a un ángel se le ocurre invadir mi territorio mientras yo me encuentro fuera? Y por sobre todo ¿Cómo se le ocurre acercarse a MI humana? Benditos cursis homosexuales alados entrometidos -y creo que no tengo para que explicar la ironía de la palabra “benditos”- siempre interfiriendo donde no los llaman, no es como si la fuera a matar, de echo debo protegerla para que no muera y a parte del daño psicológico que pueda llegar a causarle, físicamente estaría intacta y eso es lo que les importa a ellos ¿o no? De acuerdo, quizás no es tan así y acepto que me he pasado un poco siendo hostil con ella pero ¿qué esperan? Soy mitad demonio, es lógico que actuara como un maldito y la verdad es que no me arrepiento de ello, es tan divertido. Pero en fin, volviendo al inicio de todo esto, luego de besar a Lys para hacer sufrir a Cassandra –cosa que conseguí ya que note como se sintió humillada-, la lleve lejos de ahí, ella no podía reaccionar de la impresión, pobre niña tonta al parecer jamás la habían besado y eso si que debe ser triste para una adolescente, es decir ¿qué chica no ha soñado con encontrar a su estúpido príncipe azul que la consienta en todo y le de su primer beso? Lamentablemente yo soy todo lo contrario a un príncipe azul y me encanta ser así, mala suerte para ella y más diversión para mi, ya que después de todo no me pareció tan malo besarla, es decir solo fue un beso y para ser solo eso no estuvo tan mal como lo había esperando, fue casi como lo había sido con todas las demás chicas con las que había estado, ni  una me importo y Lys me importa solo porque me une a este lugar.
Cuando llegamos a su casa ella seguía sin hablar, en estado de shock o demasiado deprimida como para decir algo, eso es lo que mas odio de ella, que no logre asimilar las cosas de un modo mas rápido o tal vez es que yo soy demasiado impaciente y su mente un poco retardada, oh pero ¿para que miento? Odio hasta el aire que respira, es extremadamente molesta en todo su ser, esa aura que me hizo llegar a ella, esa esencia tiene algo que me provoca un rechazo como jamás había sentido hacia alguien, se ve demasiado débil para mi gusto, pide muchas explicaciones y no valora su vida… Humanos estúpidos… odio mi parte humana y odio a los humanos, tan manipulables, tan sumisos, tan apasionados y autodestructivos, suicidas y con temor a la muerte… La mire un momento antes de irme, quería decirle algo, algo cruel, herir su orgullo, reírme de ella por ser tan inocente pero me arrepentí y salí en silencio del lugar, ya era tarde así que podía alejarme de ella sin sufrir las consecuencias. Jamás he dicho porque no puedo salir de Seol durante el día sin tener un enlace, eso es porque los demonios estamos regidos por el poder de la oscuridad, la luz nos debilita si no tenemos directa conexión con alguien del lugar, los demonios completos no tienen la necesidad de atarse porque son más resistentes pero en todo caso evitan pasearse ante los humanos ya que los consideran despreciables, bueno, mucho mas que yo.  
Camine sin rumbo durante las primeras horas del atardecer para luego dirigirme a uno de los edificios mas altos de la ciudad, ahí estaba mi lugar de residencia, el ultimo piso que me pertenecía solo a mi, no tenia mucho contenido, algunas cosas necesarias, un par de muebles pero las paredes estaban vacías, pintadas de blanco creando la ilusión de ser aun mas amplio de lo que debería. Me asome por el balcón y deje que los últimos rayos ya débiles del sol iluminaran mi rostro y la suave brisa de otoño desordenara mis cabellos, la luna brillaba firmemente en lo alto, es absurdo pensar que un astro tan hermoso no pueda ser independiente… los demonios estamos regidos por la luna, algunos creen que es porque dependemos de la voluntad de los ángeles para vivir pero yo creo que dependemos mas bien del equilibrio entre el bien y el mal, la luna solo demuestra que no es necesario tener un brillo propio para ser mas imponente que lo que te da la energía… El sol te muestra la verdad, la luna las ilusiones… Y ahí estaba, tranquilamente meditando sobre esto cuando sentí la llegada de un ángel cerca, son tan evidentes, no pierden su tiempo intentando ocultar su presencia y esa esencia de bondad los rodea apestosamente como un perfume barato, y lo peor de todo, es que pudo haber llegado a cualquier parte de la ciudad y no me habría importado pero se apareció justo en la casa de Lys ¿cómo lo se? Las cadenas que me unen a ella son una extensión de mi cuerpo y por lo tanto están capacitadas para advertirme en caso de “peligro” o posibles “depredadores”, ya que tanto ellas como yo sentimos la presencia benigna de un ángel. Enfurecido di un vistazo al horizonte por ultima vez y salí precipitadamente del lugar, tenia que llegar pronto y evitar que ese estúpido ser arruinara mis planes, porque sabia que si Lys tenia el tiempo suficiente de ser convencida por el, no dudaría en entregarme, no porque sea mala si no porque yo la aterrorizo.

Sentí la presencia de Daemon cerca, fue algo extraño porque nunca antes me había sucedido pero era tanta la bondad que irradiaba del ángel que creo que pude notar la maldad del demonio o al menos eso es lo que puedo llegar a concluir por el momento, también esta la horrible posibilidad de que el enlace con Daemon se haya vuelto mas fuerte y por eso lo sentí.
 En cuando Azael abandono mi habitación me sentí vulnerable y sobre todo consternada, demasiada información en tan poco tiempo,  revelaciones que no quería saber, lo único que hacen estos… seres es arruinar aun mas mi vida, y a cada momento que pienso en lo que me ha sucedido mas me convenzo de que todo es tan absurdo y sin sentido que yo… simplemente no puedo asimilarlo, aunque entiendo que este estado no podrá durar toda mi vida, al menos ya me estoy habituando a Daemon, pero justo cuando creo que ya nada podría sorprenderme aparece un ángel… es un poco injusto, pero a diferencia de Daemon, Azael me hace sentir segura…
-          Parece que estabas bien acompañada – sentí su voz cerca de mi oído y sobresaltada lo vi sentado a mi lado, sonreía, aunque era una sonrisa glacial, los ojos entrecerrados advertían peligro.
-           Yo…
-           Lo llamaste ¿verdad? – negué con la cabeza asustada – ¡ah claro! con tu inteligencia subdesarrollada es imposible que hayas encontrado el modo de hacerlo – y ahí estaba de nuevo, humillándome, tratándome como la peor escoria del mundo, demostrando su superioridad del modo mas cruel posible y yo solo teniendo dos opciones, quedarme en silencio y esperar a que se aburra o actuar… elegí por primera vez la segunda y del modo que pude le di una bofetada, tardo unos segundos en reaccionar, creo que ni siquiera le dolió pero si lo sorprendió, una chispa peligrosa apareció en su mirada. 
-                 ¡Deja de tratarme como una tonta! – exigí ya harta, mientras el mostraba una sonrisa divertida.
-                 Vaya, vaya… la pequeña humana ha reaccionado – su voz estaba cargada de algo que no pude distinguir ¿sarcasmo? ¿burla? Ambas quizás – puedes golpearme cuantas veces quieras pero eso no me afecta querida… tu fuerza no se compara con la mía y por lo tanto es como si un insecto molesto chocara contra mi, en ambos casos siento… solo asco.
-                 Como si tu cercanía fuera algo muy bueno para mí… - comente con odio. Dicen que cuando sientes algo muy fuerte no puedes controlar tus acciones, yo siento un odio desmedido por Daemon y la verdad es que ya no me importa perder la vida por ser insolente con el, después de todo no soy yo quien lo necesita.
-                 Se supone que no debe ser bueno que un demonio te haga compañía  - se aparto de mi y salto de la cama dándome la espalda – así que deberías dejar de decir cosas obvias, el ahorro de palabras es lo que mas les falta a las personas estúpidas…
-                 Entonces deberías callarte tu primero – conteste y el soltó una carcajada.
-                 Nuevamente debo recordarte que yo…  no soy una persona.
-                 Por lo tanto deberías comportarte como el demonio… oh perdón! Semidemonio inteligente que presumes ser y mantener un rato esa boca en silencio, harías un bien al mundo…
-                Quiero hacerle mal al mundo.
-                 Lo se, era una ironía, ahora resulta que de a poco te vuelves lento… - el se quedo mudo y no giro para mirarme pero note que sus puños se mantenían firmemente cerrados, sus nudillos estaban blancos, sonreí por primera vez en su presencia, había derrotado en palabras a un maldito demonio. – Y no sé como llamar a un ángel porque hasta hace poco no sabia que existían, de todos modos aunque me hubiera imaginado que lo hacían no habría averiguado el modo de invocarlos, aunque resulta interesante saber que puedo hacerlo, quizás lo logre algún día y así por fin me libraría de ti y tu molesta presencia.
-              Molesta presencia ¿eh?  - se giro y me fulmino con la mirada – cuando te bese no pensabas lo mismo… - sentí como la sangre se amontonaba en mi rostro.
-              No se a que te refieres… - pero era tarde, el me había recordado lo que había sucedido horas atrás a la salida del colegio, había recibido mi primer y horrible beso de labios de un imbécil que arruino aun mas mi vida y lo peor de todo es que parcia haberlo disfrutado, debo admitir que no me desagrado del todo pero fue extraño… sumamente extraño. – el que no haya podido reaccionar no quiere decir que me haya gustado – argumente lo mas neutral que pude, no me gusta Daemon, quizás es el tipo de chico que alguna vez imagine, pero solo en apariencia, el en si es… es todo lo contrario a lo que yo querría… - porque lo único que siento por ti es odio.
-          Parece que nos estamos entendiendo – se giro y sonrió eliminando la mirada peligrosa – ambos nos odiamos y sin embargo permaneceremos unidos por la eternidad hasta tu muerte, bien, me parece algo sumamente divertido después de todo, si solamente no me interesaras no tendría gracia estar cerca de ti, pero mantenerte alterada se hará mi método de vida de ahora en adelante – perpleja vi como se esfumaba de mi habitación y dejaba flotando en el aire las ultimas palabras como una amenaza en la noche.


Así que también me odia… esto es malo, el odio conduce a decisiones apresuradas y si no tengo cuidado terminare por desaparecer debido a mi propia irresponsabilidad, pensé que si al menos me temía no se atrevería a ir en mi contra pero esto esta mal, realmente mal, tendré que hacer algo para cambiar el posible resultado de mis acciones y lo primero que tengo que plantearme es qué es lo que buscan los humanos. Según lo que sé lo primordial para ellos es la confianza, o sea que tengo que lograr que confié en mi y para hacer eso debo dejar de molestarla todo el tiempo, pero se que hay algo que los mantiene aun mas unidos entre ellos, ese sentimiento empalagoso que me fastidia de sobre manera, del cual los ángeles están orgullosos y los demonios asqueados: El amor. Si logro que ella se enamore de mi no tendré porque temer a un simple estúpido niño en pañales que intentara destruirme, y la verdad es que no se cómo algo así no se me ocurrió antes. Volví sobre mis pasos y la descubrí abrazándose las piernas en el mismo lugar donde la había dejado, no se veía triste como las otras veces si no mas bien disgustada, sonreí.
-          ¿Molesta aun? – pregunte sabiendo la respuesta pero disfrutando de como se sobresaltaba – estabas pensando en el ángel ese ¿verdad? O en como destruirme…
-          No – negó cerrando los ojos.
-          Estaba pensando en si prefería mi vida anterior o la que tu llegaste a crear…
-          ¿Y…? – enarque una ceja.
-          Al menos tu me das una razón para morir antes – sonrió con ironía, era increíble el cambio que había tenido desde hace unos días, ahora se veía mas segura ente mi.
-          ¿Puedes explicarme porqué los humanos tienen ese absurdo pensamiento de que la muerte puede ayudarlos a huir de todo lo que los daña en la tierra? – pregunte con verdadera curiosidad  y un poco de rabia en la voz.
-          Porque… la vida de un humano no es fácil
-          Y crees que la de un demonio si… o semidemonio – comente y ella me miro sorprendida – no pequeña humana, la vida en si no es fácil pero nosotros al contrario de ti si apreciamos la vida porque sabemos donde acabaremos una vez que estemos muertos… además somos superiores a ustedes y por lo tanto no nos lamentamos de haber nacido como demonios…
-          ¿Qué quieres decir con saber donde acaban?
-          Lo que crees que estoy diciendo – asegure seriamente y me senté a su lado – ustedes los humanos pueden decir que quieren morir porque sus almas regresaran al mundo una vez mueran, reencarnaran en otra persona y vivirán otra vida, es por eso que inconscientemente no se preocupan por su destino después de muertos, pero nosotros, que somos inmortales no podemos darnos el lujo de perder nuestra valiosa vida ya que, una vez “muertos” no hay marcha atrás… - ella pareció comprender el significado de mis palabras y se mostro temerosa, había algo en su mirada que decía que comprendía de algún modo lo que yo quería decir y temía por mi… algo que nunca nadie había hecho. – Pero dejando de lado esas cosas… ven conmigo, saldremos a dar una vuelta…
-          ¿Eh?
-          Si, eso…
-          Pero…
-          Pero nada – le tome la mano y prácticamente la arrastre fuera de su habitación, nuevamente estaba sola así que no tenia que avisarle a sus padres que saldría y de todos modos, a mi eso no me importaba. – Pero dejando de lado esas cosas… ven conmigo, saldremos a dar una vuelta…
-          ¿Eh?
-          Si, eso…
-          Pero…
-          Pero nada – le tome la mano y prácticamente la arrastre fuera de su habitación, nuevamente estaba sola así que no tenía que avisarle a sus padres que saldría y de todos modos, a mi eso no me importaba.

Jamás se me había hecho difícil conquistar a una mujer en todo lo que llevaba de vida, ya sean demonios o humanas, así que sabia como funcionaba la mente femenina hasta cierto punto. Mostrar tus puntos fuertes es lo principal, ser alguien seguro contigo mismo, darles lo que quieren pero dejándolas deseando más, así caían y Lys no seria la excepción. Caminamos lo que me parecieron horas por la ciudad ya que por lo general acostumbro viajar de un modo mas rápido, pero sabia que con la chica no debía apresurarme de sobremanera, no hablamos mucho y ella parecía aburrida y preocupada, cuando llegamos al centro de la ciudad el sol la noche estaba en pleno apogeo, gente caminaba apresurada hacia sus casas y otros a divertirse, viernes por la noche es el mejor momento para distraerse un poco. Le tome la mano a Lys para guiarla fácilmente, ella se resistió un momento y luego se dejo llevar, a las chicas les encanta sentirse protegidas y notar que se preocupan por ellas, sonreí y seguí avanzando.
-            ¿A dónde me llevas? – pregunto por fin casi gritando entre la multitud, yo me detuve y me gire para mirarla mientras sonreía maliciosamente.
-          A un lugar maravilloso… - y continúe con mi camino tirando de ella conmigo, no dijo nada mas hasta que llegamos a nuestro destino -. El mejor pub de la ciudad – lo indique haciendo una floritura con la mano, ella parecía desconcertada y algo intimidada, pero estaba seguro que dentro le iba a encantar.
-          No me gustan estos lugares – declaro.
-        Este te gustara – asegure y la arrastre hacia adentro, había una enorme fila en la entrada pero eso no me preocupaba, llegue hasta donde estaba el guardia de seguridad y pasamos sin ningún problema.
-           ¿Cómo es que pudimos entrar sin ser vistos y sin pagar la entrada? – pregunto escandalizada.
-            Lo olvidas siempre ¿verdad? Soy mitad demonio – suspire resignado – puedo hacer muchas cosas sin que los humanos se den cuenta.
-          Esto es un delito…
-        Y eso a mi no me importa…
-             Pero…
-          Pero nada Lys, no te traje aquí para que critiques mi forma de hacer las cosas, lo que tu crees que es correcto para mi no tiene ningún significado, las reglas de los humanos no se aplican a mi, yo no tengo un deber con la ley de este lugar y por lo tanto no me importa si es correcto o no.
-          De acuerdo, pero de todos modos las reglas de aquí si se aplican a mi – se giro para ir hacia la entrada pero la detuve.
-          Y aunque así sea esta noche estas conmigo… todo puede ser posible para ti, solo si así lo quieres – le guiñe un ojo y ella se ruborizo pero permaneció enfadada. Se veía bastante incomoda rodeada de gente que bailaba por todos lados, realmente parecía fuera de lugar, quizás no había sido tan buena idea traerla hasta acá, pero desde mi punto de vista es el mejor lugar al que puedes ir en la tierra, es decir, muchas mujeres con poca ropa, alcohol, música, drogas… todos los vicios que hacen a los humanos felices por un corto plazo de tiempo, mientras dure la fantasía -. ¿Quieres beber algo? – ella negó con la cabeza.
-          Quiero irme a casa…
-         Eso lo dices porque recién esto esta empezando ven, vamos – y la arrastre nuevamente conmigo, esta vez hacia la barra – dos cervezas por favor – le sonreí a la chica de la barra que me devolvió una mirada coqueta y nos sirvió las bebidas, Lys se había quedado muda y me miraba enfadada sin tomar su vaso, de pronto se nos acerco una rubia preciosa para ser humana, la mire expectante hasta que hablo.
-           ¿Por qué no vienes a bailar conmigo? – pregunto sin mirar a Lys.
-          Es tentador querida… pero tengo que cuidarla – respondí indicando a Lys con la cabeza.
-          ¿Cuidarme? – se escandalizo mi humana – ya he tenido suficiente – se levanto y camino decidida hasta la entrada, yo me encogí de hombros ante la rubia y la seguí.
-         Para la próxima – le grite a la chica cuando ya estaba lejos.
Encontré a Lys en la entrada esperando salir, le tome la mano pero ella se soltó.
-           Déjame -  ordeno.
-          Te llevare a tu casa – comente cansado, al parecer realmente había fracasado en mi primer intento de conquistar a Lys, parece ser que no todas las mujeres son iguales, pero hasta el momento esta había sido la mejor técnica que había ocupado y nadie jamás me había rechazado, debo admitir que me sentí frustrado y mas molesto, pero debo controlarme, la lleve hasta su casa y sin decir nada desaparecí, ya me tendría de nuevo en la mañana, para mantenerla alejada de ese molesto mosquito con plumas porque de algo estoy seguro, nada ni nadie romperá el enlace que tengo con Lys…

lunes, 13 de diciembre de 2010

Sognare


Se que un dia te dije
Que jamas iba a fallarte pero hoy,
No se ni en donde estoy, menos a donde voy.
Y es que mas que curarme estas drogas
Solo logran enfermarme mas...
Que te extrana que manana pueda ser un poco peor,
Sere frio pero honesto cada vez que yo te digo que:
No puedo prometer un "por siempre"
Ni siquiera se si puedo un "hoy"
Todo lo que diga esta noche olvidalo...
Sonare contigo si puedo dormir,
Las noches son largas desde aquel dia
En el que yo te conoci...
O naci enamorado o en verdad nunca lo he estado
Y no es que no crea en el amor, simplemente asi soy.
Si decir "manana" es predecir y decir "perfecto" es mentir
Por que no mejor sentir; estos labios, estas manos
Que no paran aunque estoy tan debil de intentarlo y fallar tanto,
las marcas en mis brazon dicen:
No puedo prometer un "por siempre"
Ni siquiera se si puedo un "hoy",
Todo lo que diga esta noche olvidalo...
Sonare contigo si puedo dormir,
Las noches son largas desde aquel dia
En el que yo te conoci...
Mi angel de la guarda aguarda en tu cama
Lo envie a cuidarte, por tu bien alejarte
Para siempre de mi...
Y no me arrepiento de nada que hice ayer
me arrepiento de lo que pude haber hecho, haber dicho
y ya no podre hacerlo jamas...
No se si puedo prometer un "por siempre"
Ni siquiera se si puedo un "hoy"
Todo lo que diga esta noche... esta noche
Sonare contigo si puedo dormir,
las noches son largas desde aquel dia
en el que yo te conoci...
Mi angel de la guarda aguarda en tu cama
lo envie a cuidarte, por tu bien alejarte
para siempre de mi...

miércoles, 8 de diciembre de 2010

Réquiem IV

Capitulo 4

-              Así es como están las cosas, ha ocurrido de nuevo y por lo tanto hay que detenerlo antes de que la conexión sea más fuerte.
-              Y cuando la conexión se rompa ¿qué sucederá con ellos?- pregunte sin poder evitarlo.
-              Oh es verdad que aun eres nuevo en esto – dijo el anciano dirigiéndome una sonrisa condescendiente – Cuando en enlace es roto el demonio muere, pero a lo que nosotros nos importa es que el humano continúe viviendo tranquilamente – comento con un tono de preocupación, sus ojos grisáceos se posaron en los míos como intentando transmitirme la importancia de mi misión solo con una mirada – puede que te enfrentes a algo realmente maligno, quizás el consejo debería reconsiderar su decisión de enviarte precisamente a ti…
-              Jeliel, por favor déjeme ir a mi, prometo no decepcionarlos…
-              Azael… no  caigas en el pecado de la búsqueda de poder, esto no se trata de ti, se trata de la vida de un humano que es lo que mas debería importarnos, sobre todo a nosotros los ángeles – dijo preocupado –. Tu nombre, sabes de donde proviene ¿no? – asentí débilmente – significa “a quien Dios fortalece” y solo por poseer ese nombre se esperan grandes cosas de ti, no hagas lo que hizo Asbeel… - ante la mención de ese nombre una sensación de profunda tristeza se apodero de mi, el anciano pareció notarlo así que no insistió en el tema, Jeliel esta en la segunda escala de poder de los ángeles, justo por debajo de los tres arcángeles, es el líder del consejo que decide las misiones de los ángeles guardianes y yo… yo soy un ángel guardián.
-              No busco poder Jeliel, busco ayudar, quiero ser de utilizad para la orden angelical, quiero que los humanos queden libres de la invasión de los demonios – aclare decidido pero sin odio, los ángeles no odiamos, solo sentimos tristeza por las maldades del mundo, aunque de vez en cuando hay algún ángel que se contamina y cae, son los llamados ángeles caídos, algo en lo que yo definitivamente no quiero convertirme.
-              Siendo así… supongo que no me queda mas opción que enviarte a ti, solo espero que esa pasión por defender a los mas débiles no te lleve a otro sentimiento, ten cuidado Azael – dijo gravemente pero luego me sonrió – las puertas de Caelum serán abiertas para ti, mientras mas pronto vayas al mundo humano, mas pronto podremos salvar esa alma – yo asentí sonriendo también, hice una leve inclinación y me fui a preparar mi partida.
Mientras caminaba rememoraba aquel pasado que ahora me parecía tan lejano Jeliel había vuelto a recordarme mi antigua vida, una vida en la cual tenia alguien en quien apoyarme cuando lo necesitaba, no me agradaba pensar en ello pero dado mi carácter era frecuente que recuerdos de mejores tiempos vinieran a mi cabeza, sin darme cuenta mis pasos me habían llevado hasta el portal que me llevaría hasta el mundo de los humanos, pronto conocería a la persona que debía salvar,  los ángeles de mayor rango habían decidido que me presentara durante la noche para si evitar encontrarme con el semidemonio que ahora se unía a ella, ellos querían que primero la conociera para que de alguna forma ella me ayudara cuando llegara la hora del enfrentamiento. El portal se abrió y apenas mis ojos lograron acostumbrase a la oscuridad la sentí, sentí su necesidad de compañía, su miedo, su frustración, pero increíblemente entre todo eso había una nota de esperanza, mi instinto protector despertó al instante, se veía tan frágil, tan vulnerable, quería cuidarla, liberarla … supuse que todos lo ángeles se sentían así cuando conocían a quien debían proteger, era una sensación indescifrable algo que jamás había sentido. Mientras pensaba ella comenzó a despertar, mi misión consistía en cortar el lazo que la unía al semidemonio pero sin permitir que ella me viera, solo debía permitir que supiera que estaba ahí, acompañándola de algún modo y  mi presencia en la misma habitación bastaba para que ella sintiera que no estaba completamente sola, los ángeles tenemos la habilidad de transmitir energía positiva por lo tanto, cuando estamos en el mismo lugar que un humano este se sentirá extrañamente bien sin saber por que.
 -             ¿Quién eres tu? – pregunto de pronto entre la oscuridad, sin levantar la cabeza ni abrir los ojos, me sorprendí  tanto que retrocedí un poco chocando contra un estante y derribando algunos objetos que ahí habían, el que podamos ser invisibles no quiere decir que seamos incorpóreos a menos que queramos serlo, me refiero a que si no hubiera perdido la concentración en ese momento no habría pasado nada con ese estante, intente mantener el silencio pero ya era tarde, la chica se incorporo y asustada comenzó a observar su alrededor. -  ¿Daemon? – pregunto dubitativa, no podía verme pero sabia que estaba ahí, del algún modo que ni siquiera yo podía comprender, ella tenia la certeza de que en el lugar había alguien mas en el lugar aunque no estaba segura de quien era – no, no eres Daemon… - afirmo aun con miedo en la voz y aferrándose a las sabanas.
- Puedes sentir mi presencia… - comente en voz baja aun sorprendido y sobre todo asustado, esto realmente no estaba en mis planes.
- ¿Quién eres? – repitió encogiéndose y temblando de miedo, intente transmitirle tranquilidad y me acerque un poco, pero creo que estaba demasiado contrariado como para lograr un buen efecto, no respondí, quizás lo mejor seria irme por el momento y esperara a que fuera de día para no asustarla tanto, el aura que emanaba de ella parecía incluso mas débil de lo que me habían descrito, con razón ese semidemonio había decidido atarse a ella – por favor… - susurro – no me tortures así…
- Lo siento – murmure afligido – no quería asustarte…
- ¿Dónde estas? – Pregunto con pánico en la voz y yo, sin poder soportarlo mas aparecí en el lugar, ella ahogo un grito y me miro como si no creyera en lo que veía - ¿qui… quien eres?
- Soy Azael… un ángel… - respondí.

Un ángel… sus palabras poco a poco cobraban sentido en mi mente… Un ángel… no era como si no pudiera creerlo, después de todo tenia a un semidemonio atado a mi  pero era como una luz en la oscuridad de mi vida, el solo hecho de que un ángel me visitara parecía el indicio de una muerte segura, el final de mi existencia estaba cerca y yo podía sentirlo, eso era lo que deseaba o al menos eso creía hasta el momento.
-              ¿Vienes a buscarme? – pregunte notando como el miedo se esfumaba e incorporándome para verlo mas detenidamente, la luz de la luna de filtraba por la ventana iluminando un poco el lugar por lo que pude apreciar su apariencia tenia el cabello rubio, casi blanco, su rostro tenia una belleza etérea pero aun así seguía pareciéndome humano, no pude ver el color de sus ojos, quizás solo era una trampa y era una ilusión de Daemon para jugarme otra de sus bromas… al pensar en su nombre recordé lo que había sucedido en la tarde, ese beso… mi primer beso fue con un demonio, con la persona que se supone que odio por transformar mi vida y ni siquiera pude moverme ni reaccionar adecuadamente…
-              Vengo a rescatarte – aclaro sacándome de mis pensamientos, se acerco un poco, arrodillándose al lado de mi cama, pude ver sus ojos que eran asombrosamente azules, lo mire unos momentos sin dar crédito a sus palabras.
-              ¿Rescatarme? – pregunte aturdida.
-              Exacto, estas atada a un semidemonio y  yo fui enviado para liberarte de eso y para que regreses a tu vida cotidiana – respondió amablemente con una sonrisa  y pensé, dolorosamente como Daemon se habría burlado de mi por hacer ese tipo de preguntas, algo en mi rostro debió delatarme porque el ángel se inclino y me tomo la mano preocupado, su contacto causo efecto inmediato sobre mi, una calidez indescriptible recorrió mi cuerpo desde el punto donde poso sus dedos hasta el centro de mi pecho, sonreí débilmente – tranquila pequeña, hare lo posible porque estés bien… - el no dijo feliz, supongo que estar bien es la base de la felicidad y los ángeles deben sentirse tranquilos al dar tranquilidad.
-              ¿Eres real? – susurre tímidamente.
-              Los demonios son reales y lo sabes… entonces si existe el mal también debe existir el bien – comento nuevamente con ese tono dulce en la voz, como si yo realmente le importara aunque no me conociera, nadie en mi vida me había hablado de ese modo, con tanto cariño en la voz y en la mirada, sentí que los ojos me ardían pero no quería llorar, seria demasiado patético, mis acciones parecieron confundirlo porque se alejo un poco, frustrado y apartando su mano, lo que dejo un extraño vacío en mi – disculpa… - murmuro apenado – quizás debería darte un poco mas de espacio para que asimiles mi presencia en este lugar – era tan diferente a Daemon, tan comprensivo y tierno, sentí que con el podría ser como quisiera y me aceptaría de ese modo sin criticar ni intentar cambiar nada de mi, y ya sin poder soportarlo las lagrimas cayeron por mis mejillas, cerré mis ojos y rodee mis piernas con mis brazos y de pronto sentí su mano sobre mi cabeza y mi llanto aumento, el me abrazo y yo salí de mi burbuja protectora y lo abrace también sin dejar de sollozar, no lo conocía, no sabia si realmente era un ángel y la verdad es que ya no me importaba, solo quería sentirme comprendida alguna vez en la vida, solo quería sentir un cariño que aunque no fuera real me indicara que había alguien que se preocupaba por mi, solo quería… quería compañía.
               
Su dolor y su miedo se clavaron como agujas en mi, cada lagrima que ella derramaba era como una tortura para mi, la desventaja de los ángeles es que estamos demasiado sujetos a las emociones que nos transmiten los humanos a los que protegemos, el odio puede llegar a matarnos y la tristeza puede herirnos profundamente, nosotros por naturaleza sentimos un amor irracional por los demás, incluso sentimos angustia por los demonios quienes no han elegido su origen y están destinados a vivir como tales por la eternidad, aunque claro ellos no lo sienten de ese modo y nosotros lo comprendemos, es difícil acabar con algún demonio, no porque sean mas poderosos si no porque al apreciar la vida el matar no es para nosotros una opción, aunque por deber con los humanos tenemos que muchas veces hacerlo, por el bien de todos.
-              Tranquila… - susurre y esa palabra me pareció vacía y sin sentido, no podía pedirle que se tranquilice, había pasado por momentos difíciles y su desdicha era tal que me indicaba que no solamente era por el semidemonio que sufría, su vida parecía no haber sido del todo feliz y normal.
Lloró por unos minutos más y luego, ya más calmada levanto la vista, yo me aparte de ella para darle espacio, la mire directamente a los ojos,  a pesar de la oscuridad pude apreciar lo bella que se veía aun con lagrimas en los ojos, los humanos son seres realmente fascinantes, el equilibrio perfecto entre el bien y el mal y son sobre todo débiles y propensos a la muerte, lo que los hace aun mas interesantes.
-              Lo siento – dijo con voz llorosa aun, sonreí con tristeza.
-              No lo sientas pequeña, es natural que te sientas así… prometo rescatarte de esta pesadilla…
-              Daemon dijo que no había forma de liberarme de el a menos que alguno de los dos muera… - comento preocupada y mirándome asustada – ¿eso quiere decir que lo mataras? – pregunto temiendo mi respuesta.
-              No necesariamente… - respondí extrañado por su reacción, parecía temer por la vida del semidemonio – es decir,  no lo matare pero de todos modos el morirá – explique y ella me observo aun mas temerosa – yo tengo el poder de romper las cadenas que te atan a ti y al semidemonio, pero si lo hago el desaparecerá ya que los poderes de los ángeles son letales para los demonios…
-              ¿Y hay alguna otra forma de separarnos sin que el muera?
-              No… solo tú debes morir para mantenerlo con vida y eso es precisamente lo que yo debo evitar…
-              Entonces en cualquiera de los casos… uno morirá… - susurro con tristeza.
-              Así es…
-              ¿Estas seguro que eres un ángel? – pregunto angustiada.
-              Soy tu ángel guardián, debo protegerte aunque eso signifique acabar con un demonio – dije temiendo que mis palabras fueran demasiado duras, seguramente ella estaba viendo al semidemonio como un humano y por lo tanto le costaba asimilar el hecho de que muriera, yo no quería hacerla sufrir pero si no había mas remedio, haría cualquier cosa por su bien, de eso estaba seguro.
-              Mi ángel guardián…
-              Solo tuyo… pequeña…
-              Lys, mi nombre es Lys – se presento secándose los rastros de lagrimas que habían aun en sus mejillas, sonrió un poco – es extraño que no lo supieras dado que eres un ángel…
-              Nosotros no sabemos todo de los humanos – conteste – nos gusta que mantengan su privacidad, que se sientan cómodos, además es mas divertido cuando algo no se conoce del todo, el ir descubriendo cosas nuevas siempre es interesante – ella sonrió aun mas, parecía estar tomándome confianza poco a poco y eso me hizo feliz, la comunicación con mi protegida seguramente iria creciendo a medida que pasaran los días.
-              ¿Cómo rompes las cadenas?
-              Tienen que estar ambos presentes… el proceso es un poco difícil de explicar pero lo importante es que tu debes darme todo su apoyo y estar de acuerdo con la ruptura o sino no podre lograr nada…
-              De acuerdo…  - susurro nuevamente con un tono de tristeza.
-              No te preocupes, todo saldrá bien y cuando termines me encargare de que olvides todo…
-              ¿Olvidar…?
-              Si, borrare tu memoria para que todos estos acontecimientos lamentables no te despierten en las noches… - ella se puso tensa, como si se estuviera reprimiendo para decir algo, la mire extrañado pero me miro asustada.
-              Ya viene… tienes que irte…
-              ¿Viene?
-              Daemon… - y comprendiendo a que se refería me levante rápidamente, no era bueno que el semidemonio me encontrara en ese lugar, solté la mano de Lys y mirándola por ultima vez desaparecí del lugar, siento una singular angustia al dejarla sola…

viernes, 26 de noviembre de 2010

Musica ~~


Dysfunctional family




I'm a punk I'm a sinner 

I'm lost new beginner 
I'm a thread to myself 
I'm a get armargeddon 
I'm a freak I'm a liar 
I'm a flirt I deny that I'm not good 



And sometimes I feel like 
I'm only one 
No wonder why I've become 
so dum so dum di dum di dum 



I get more and more strange 
I'm going insane I'm building it up 
Just to break it down 
it get what you see 
It's my destiny 
the product of a dysfunctional family 



dysfunctional, dysfunctional 
dysfunctional family 



I'm a bit suicidal 
I'm my own worst rival 
Trainwreck, white trash, freak, maniac, psycho 
I'm a troublemaking rebel 
Made a deal with the devil 
I'm way past ever coming back 



But sometimes I feel like 
I'm not the only one 
When I see why I've become 
so dum, so dum di dum di dum 



I get more and more strange 
I'm going insane I'm building it up 
Just to break it down 
It's my destiny 
the product of a 



dysfunctional... 



I'm not anybody 
Don't you cry for me 
I'm just from a dysfunctional family 



Family family family family... 



I get more and more strange 
I'm going insane I'm building it up 
Just to break it down 
it get what you see 
It's my destiny 
the product of a dysfunctional family.

Fue tan lol escuchar esta cancion xD de alguna forma extraña me senti identificada todo gracias a Cinema Bizarre 

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Musica ~~

Shadow Of The Day 


I close both locks below the window.

I close both blinds and turn away.
Sometimes solutions aren't so simple.
Sometimes goodbye's the only way.
And the sun will set for you,
The sun will set for you.
And the shadow of the day,
Will embrace the world in grey,
And the sun will set for you.
In cards and flowers on your window,
Your friends all plead for you to stay.
Sometimes beginnings aren't so simple.
Sometimes goodbye's the only way.
And the sun will set for you,
The sun will set for you.
And the shadow of the day,
Will embrace the world in grey,
And the sun will set for you.
And the shadow of the day,
Will embrace the world in grey,
And the sun will set for you.
And the shadow of the day,
Will embrace the world in grey,
And the sun will set for you.





¿Hace cuanto que mis mejillas no sentían las lagrimas caer? ya ni siquiera lo recuerdo, pero hoy todo es distinto caen sin mas, me siento tan vacía, es como si no fuera capaz de sentir nada y sin embargo mis ojos no paran de llorar,...
Es tan patético, soy tan patética ... pero supongo que no saco nada con auto compadecerme,  no hay  nada mas ridículo que eso...



"Sometimes solutions aren't so simple.

Sometimes goodbye's the only way"

Musica ~~

Animal I have become

I can't escape this hell 
so many times I've tried 
but I'm still caged inside 
somebody get me through this nightmare 
I can't control myself 


so what if you can see the darkest side of me 
no one will ever change this animal I have become 
help me believe it's not the real me 
sombody help me tame this animal 



I can't escape myself 
so many times I've lied 
but there's still rage inside 
somebody get me through this nightmare 
I can't control myself 



so what if you can see the darkest side of me 
no one will ever change this animal I have become 
help me believe it's not the real me 
somebody help me tame this animal I have become 
help me believe it's not the real me 
somebody help me tame this animal 



somebody help me through this nightmare 
I can't control myself 
somebody wake me from this nightmare 
I can't escape this hell 



so what if you can see the darkest side of me 
no one will ever change this animal I have become 
help me believe it's not the real me 
somebody help me tame this animal I have become 
help me believe it's not the real me




La letra de esa canción representa como me siento el día de hoy, atrapada dentro de mi viviendo en un circulo vicioso del cual no soy capaz de escapar, si  tuviera la voluntad suficiente para hacerlo quizás resultaría, pero soy tan débil, muchas veces me odio por eso se que tengo todo para ser feliz, pero algo en mi interior no me permite disfrutar de lo que tengo, cada día me encierro mas en mi misma aunque nadie lo note ….